La preparación y producción de vigas y piezas de madera se traslada cada vez más a centros de tratamiento estacionarios. Simultáneamente, el montaje in situ gana en importancia y exige altas demandas a cada profesional – especialmente en la protección térmica estructural, tecnología de aislamiento y hermeticidad. Para esto, usted necesita máquinas móviles, robustas y precisas.